Si tu hijo tiene diabetes, ¡este es su aliado!
1. Predica con el ejemplo Esta es la mejor manera de cambiar sus costumbres, ya que será más fácil que tu hijo aprenda a vivir con este padecimiento si no se siente excluido de las rutinas familiares.
2. Manténganse activos Realicen alguna actividad física: anden en bici, naden, bailen, corran… Recuerden visitar al médico antes de iniciar cualquier rutina de ejercicio.
3. Llenen sus platos… De verduras, cereales integrales y carnes magras. Eviten las harinas procesadas y los dulces; toma en cuenta que no solo él debe hacer este sacrificio la clave para que esté sano es que toda la familia también lo esté.
4. Aprende a inyectar Si tu hijo vive con diabetes tipo 1, necesitará dosis de insulina periódicamente, y si aprendes a aplicársela no asociará los hospitales y clínicas con el dolor. Piérdele el miedo a las agujas y toma un curso, así él verá que estás comprometida con su tratamiento.
5. Cuida su piel Pregúntale al doctor cuáles cremas son mejores para hidratarla; aunque en el mercado hay muchas, es importante que no compres cualquiera. Ayúdalo a revisar sus pies, especialmente entre los dedos, y recorta sus uñas con cuidado.
6. Enséñale a monitorearse Establece una rutina diaria para checar sus niveles de azúcar. Regálale una libreta para que anote su progreso y así será más fácil mostrar este control a su médico y a su nutriólogo Por último, ten presente que lo que dices es muy importante; no hables de enfermedad y sacrificios, sino de esperanza, cambios y nuevas costumbres.
Lo que tu hijo sí y no puede comer: