¿Volviste a fumar? Aquí te decimos cómo dejarlo
Cualquier persona presa de la adicción al tabaco ha tenido el temor de emprender el camino de la abstinencia y fallar. Este es un riesgo que siempre está latente (incluso cuando se ha dejado el cigarro durante muchos años). Aunque no tiene sentido empezar este proceso asumiendo que no se tendrá éxito es un acierto saber qué es lo que se debe hacer en caso de una recaída. He aquí algunos tips:
No todo este a perdido Si no resististe y prendiste un cigarrillo, no estás obligado a fumarte toda la cajetilla. Sacúdete el polvo de esta caída y comienza de nuevo a partir de… ¡ya!
Detecta qué fue lo que te hizo recaer Es muy importante que identifiques en qué situación te encontrabas, cómo te sentías y qué te llevó a pensar que no valía la pena continuar con tu abstinencia. Cuando lo intentes de nuevo debes evitar a toda costa exponerte de nuevo.
Haz un recuento de los beneficios de dejar de fumar Si decidiste renunciar al tabaquismo fue por algo. ¿Recuerdas lo diferente que se siente tu organismo sin fumar? Ten en mente lo grato que es percibir nuevamente los olores y sabores y la gran satisfacción que se experimenta cuando sabes que ya no tienes que salir corriendo a buscar cigarros cuando están por acabarse. ¡Ser libre no tiene precio!
Pide ayuda profesional ¿Consultaste con tu médico qué plan para dejar el tabaquismo te convenía más? Dejar la nicotina no es cualquier cosa: un experto te puede dar un tratamiento especial que te ayude a superar el síndrome de abstinencia sin tanto sufrimiento.
¡Tú puedes! No te decepciones de ti mismo. Recaíste, pero eso no quiere decir que no puedes comenzar de nuevo y, sobre todo, que no puedes mantenerte libre de tabaco con éxito. ¡Inténtalo y vencerás!
Ansiedad a la baja
Zanahoria Es el alimento ideal para lidiar con la ansiedad. Pica palitos de zanahoria y tenlos a la mano: cada vez que sientas deseos de fumar cómete uno.
Legumbres Serán tus aliadas en el proceso de abstinencia porque mejoran tu digestión, la cual suele experimentar cambios cuando se deja el cigarro.
Agua El cigarro reseca nuestro organismo (tu garganta y tu piel son prueba suficiente). Es indispensable que recuperes el tiempo perdido y te hidrates.