¡Adiós lesiones!
Sé paciente Si dejaste de hacer ejercicio por algunas semanas, lo ideal es retomar poco a poco hasta lograr las metas realizadas antes de dejarlo.
Elige una rutina adecuada Pídele a un instructor del gimnasio una rutina apta para tu peso y tus actividades diarias.
Calentamiento previo Ya seas principante o experto, debes calentar siempre antes de hacer ejercicio. Es la mejor manera de evitar lesiones y tu rendimiento será mayor.
Usa los aparatos para lo que fueron hechos Uno de los errores más recurrentes en el gimnasio es querer usar aparatos para las piernas como si fueran para el abdomen, o bien, aparatos para los brazos como si fueran para la espalda. Al hacerlo, lo único que ganarás es lastimar alguna de tus articulaciones.
Hidrátate y aliméntate bien Es una buena manera de mantener oxigenado tu cuerpo y ayudarlo a que absorba los nutrientes necesarios. Bebe pequeños sorbos de agua natural entre cada ejercicio; de esta manera, evitarás calambres o lesiones musculares. También comer algo ligero y rico en proteínas antes y después de la rutina, ayudará a que tu metabolismo sea más rápido y eficiente.
Estira! Es uno de los hábitos básicos y necesarios, pero también uno de los más olvidados. Es importante que cada vez que termines de hacer tus rutinas, estires los músculos y ligamentos para aumentar su flexibilidad y evitar dolores al día siguiente.
Utiliza ropa y calzado adecuado La ropa está diseñada para brindarte comodidad y evitar lesiones, es por eso que debes fijarte en las necesidades de cada ejercico o deporte que practiques.
UN TIP La constancia siempre será una de tus mejores aliaddas para evitar lesiones de cualquier tipo a la hora de hacer ejercicio.