Un alimento para aprovechar
El pescado es un alimento que especialistas en nutrición recomiendan para llevar una dieta saludable, pues sus propiedades son de gran beneficio para que nuestro cuerpo funcione correctamente. Estos beneficios se deben a que el pescado tiene proteínas de buena calidad, minerales como el hierro, el zinc y ácidos grasos como el Omega 3, entre otros nutrientes.
Generalmente, al comer pescado, las partes más comunes que se utilizan para cocinar son el lomo, medallones y filetes.
Sin embargo, es posible utilizar todo el pescado completo para realizar diversos tipos de preparaciones. A continuación, te decimos todas y cada una de las partes del pescado que puedes utilizar para que le saques el mayor provecho a este alimento.
-Cabeza: Se divide en los ojos, boca y las branquias o agallas. Utilízalas para dar sabor a guisos, sopas, salsas y caldos.
-Cola: Es la parte final del pescado en donde encontrarás la aleta caudal, que es lo que les sirve para impulsarse. Se aprovecha para guisos, caldos, salsas y sopas. No la confundas con la “cola de pescado”, que son unas láminas transparentes gelatinosas que disueltas en agua sirven para hace gelatinas o dar consistencias a ciertas preparaciones.
-Filete: Se obtienen 4 por cada pescado, una vez se ha desespinado. Prepáralos al vapor, al horno, a la plancha, empapelado o a la parrilla.
-Medallones: Cortes longitudinales de diferentes grosores. Lo diferencias porque va con piel y espina dorsal. Aprovéchalo en salsas, a la parrilla o a la plancha.
-Suprema: La puedes extraer de un lomo limpio, sin espinas, y a veces con piel. A la parrilla, al horno o a plancha son las mejores técnicas de preparación.
-Ventresca: En esta parte del estómago se encuentra una mayor cantidad de grasa. Disfrútala a la parrilla.
-Lomo: Se obtienen tras la división del pescado en dos partes longitudinales iguales. Prepáralo al vapor, al horno, a la plancha, empapelado o a la parrilla.
Es importante que cuando vayas a comprar un pescado, tomes en cuenta los siguientes consejos:
-Que tenga un olor fresco.
-La carne debe ser blanca o ligeramente rosada, firme, elásticas y resistente a la presión de los dedos.
-La cola debe ser firme y los ojos brillantes y saltones.
-La piel debe ser brillante y húmeda, no grasosa, con las escamas adheridas y el vientre no debe estar abultado.
Finalmente, te compartimos dos recetas fáciles de preparar en donde podrás utilizar varias partes del pescado.