Cómo hacer un lunch saludable, ¡rápido y fácil!
Sigue estos sencillos consejos y aporta al organismo de tu hijo justo lo que necesita a la hora del recreo.
Agua natural o de frutas El horario promedio de los niños en edad escolar es de 8 horas con 30 minutos de descanso, incluir agua los ayudará a mantener su cuerpo bien hidratado y su cerebro en funcionamiento pleno. Prefiere el agua natural a los refrescos, jugos procesados y bebidas energéticas. TIP Consigue una cantimplora hermética para evitar derrames y asegúrate de lavarla y secarla bien para alejar la aparición de hongos.
Mide los carbohidratos Las barras de cereal son buenas para sacarte del apuro, ¿pero siempre le mandas lo mismo a la escuela? Procura que su alimentación sea variada y de calidad, incluye granos integrales, vegetales y frutas de todos los colores para que se nutra con las vitaminas que éstas aportan. Los sándwiches de mermelada son una redundancia de carbohidratos que necesitarán metabolizar mediante ejercicio para evitar la obesidad infantil. TIP Mándale una sola porción de carbohidratos (galletas, barras, arroz, etc.).
Una porción de fruta Es una fuente importante de vitaminas, minerales y fibra que mantendrá el nivel de energía que tu hijo requiere. No incluirla lo privará de sus beneficios y tiene como consecuencia que tu hijo no considere las frutas como una gran aportación a su nutrición. TIP Prefiere aquellas que son resistentes al manejo de la mochila, como manzanas y peras; además, envía porciones pequeñas que puedan consumir rápidamente y masticar bien.
Embutidos con moderación El clásico sándwich tiene como desventaja el uso de embutidos, productos que son altos en sodio y grasas y que a la larga podrían traer problemas para la salud de tus hijos. Por mucha que sea la tentación, por la practicidad que éstas simbolizan, minimiza el consumo de embutidos altos en grasa. TIP Siempre combina una porción de embutidos con algún vegetal o lácteo (lechuga o queso blanco).
Semillas, ligeras y nutritivasAdemás de que son ideales para calmar la ansiedad y el hambre, la cantidad de nutrimentos que contienen las semillas (de girasol, pepitas, chía, ajonjolí, etc.) son incontables. Envíaselas en un recipiente pequeño y hermético a manera de postre. TIP Prefiere las semillas naturales, pues hay algunas ‘caramelizadas’ que aportan mucha azúcar.