Tu postre, ¡tu mejor aliado!
1. Un postre para disminuir la ansiedad Si estás en un régimen alimentario demasiado estricto, es posible que la necesidad de ingerir algo dulce te quite el sueño. Dale la vuelta a esta desagradable sensación y disfruta moderadamente de ese gusto. Por ejemplo, si acostumbras comer una rebanada de pastel regular, consume una porción menor o comparte tu plato.
2. Un postre para estar satisfecho Algunas personas aseguran que no pueden dejar de comer hasta que consumen algún tipo de dulce, ya sea procedente de frutas o de postres preparados. Si este es tu caso, no elimines de golpe este hábito, pero cambia los chocolates, helados y otros por gelatinas light o fruta.
3. Un postre para reemplazar y disfrutar Si en la comida te faltó comer tortillas o legumbres, como frijoles o lentejas, entonces date el gusto de terminar con un poco de helado de yogurt bajo en azúcar, que compense los carbohidratos que evitaste. Recuerda: el azúcar en cualquiera de sus formas también es un hidrato de carbono; evita abusar de ella.
4. Un postre para obtener fibra Si comes fruta, como manzanas operas, al término de tu comida, le darás a tu cuerpo un ingreso extra de fibra, necesaria para reducir el colesterol y mantener tu sistema digestivo en óptimas condiciones.
5. Un postre para llenarte de energía Si eres deportista ocasional o de alto rendimiento, sabes que necesitas carbohidratos para enfrentar la fatiga y el desgaste diario. Saborea ese postre que tanto te gusta y, en cambio, dile no a los segundos platos y a las preparaciones con crema batida, mantequilla adicionada y jarabes.
UN TIP Elige los ingredientes adecuados y crea postres saludables y deliciosos. Prueba y comparte esta receta /node/1813