El mejor acompañante de tus platillos
De acuerdo con el libro La papa: producción, transformación y comercialización de R. B. Egúsquiza, el puré es una forma procesada de algún alimento que contiene las características deseables de un producto moderno: mayor capacidad de conservación, preparación rápida y no genera desperdicios domésticos.
Para hacer un puré es necesario hervir el alimento que se vaya utilizar para realizar el puré, una vez de que haya quedado suave, se aplasta el alimentos hasta obtener una pasta o masa; le puedes añadir mantequilla, leche nuez moscada y sal o cualquier condimento que desees y estará listo cuando todos los ingredientes se hayan integrado completamente.
Las características de un buen puré es su textura, esta debe quedar suave y no aguada; no deben verse los grumos, todos los ingredientes deben quedar bien integrados para que al final se vea una consistencia suave, tersa y brillosa.
El puré más conocido por la mayoría de nosotros es el puré de papa, pero en realidad los purés ofrecen muchas formas distintas de elaboración y sabores variados, por ejemplo: puré de aguacate, garbanzo, zanahoria y betabel, de los que les hablaremos a continuación.
El puré de aguacate, es útil para la prevención de la arteriosclerosis, ayuda a regular los niveles de colesterol, estimula la formación de colágeno, también ayuda en problemas de dermatitis y granos; además por su contenido en vitamina D, ayuda a la absorción del calcio y fósforo; retrasa el proceso de envejecimiento por su contenido de vitamina E. Y es ideal para las personas que viven con diabetes, pues es un equilibrante del azúcar en la sangre.
En cuanto al puré de garbanzo, este es rico en proteínas vegetales, vitaminas, minerales, fibras alimentarias y en glúcidos asimilables, por lo que aporta energía, es diurético, ayuda a la digestión y elimina el ácido úrico; aporta beneficios intestinales y además mejora el estado de ánimo.
Por otro lado el puré de zanahoria, es rico en betacaroteno, contiene minerales como calcio, hierro, potasio, fósforo y vitaminas como las B, D, D, E y ácido fólico. Por lo que estimula el apetito, ayuda a depurar la sangre, alivia los problemas respiratorios, ayuda a regular el ciclo menstrual, reduce la anemia, combate el estreñimiento, fortalece cabello y uñas, disminuye el colesterol, mejora la leche materna, mejora el humor y es buena para la vista.
Y en cuanto al puré de betabel, gracias a que contiene minerales como calcio, hierro, magnesio, fósforo, potasio, sodio, zinc y cobre; y vitaminas C, E, K, B6 y tiamina, rivoflavina y niacina, ayuda a reducir los niveles de presión arterial y el colesterol malo, previene la placa dental, también ayuda a combatir la osteoporosis, y a controlar la diabetes, además trata la anemia, ayuda a combatir el estreñimiento y a mejorar la actividad cognitiva, entre muchos otros beneficios más que aporta este alimento.
Para finalizar, te dejamos dos recetas de puré, ideales para acompañar tus platillos.