Cómo recuperarte rápidamente de tu rutina
Enfría
Después de una rutina de ejercicios, dedica de cinco a 10 minutos para que tus músculos enfríen de forma adecuada: trota y luego camina, pues así tu ritmo cardiaco no caerá de golpe ni tendrás desequilibrios en tu azúcar o presión.
– Toma líquidos
El ejercicio causa sudor y este a su vez crea deshidratación leve: toma agua antes, durante y después del ejercicio y si crees que no es suficiente, recurre a las bebidas hidratantes especiales para los deportistas. Cuida su consumo, porque son ricas en azúcares.
– Come adecuadamente
Has terminado tus rutinas con un hambre atroz? Esto es porque tu cuerpo gastó sus reservas energéticas y necesita más para seguir produciendo tejido muscular y prepararse para el siguiente reto físico. Intenta comer por lo menos 60 minutos después de tu ejercicio e incluye proteínas y carbohidratos complejos.
– Realiza estiramientos
Dedica los últimos momentos de tu enfriamiento para realizar estiramientos estáticos, como algunas posiciones de yoga; tus músculos se recuperarán rápido y regresarán a su lugar adecuado en caso de que estén inflamados.
– Descansa
Dedica algunos momentos para permanecer sentado o recostado y dale tiempo a tu cuerpo para que se recupere: tu organismo sabe cómo auto curarse y lo que necesita es un periodo, aunque sea corto, de inactividad para estar listo.
– Practica la recuperación activa
Movimientos ligeros de articulaciones, pequeños giros de cadera todos ellos te ayudarán a mejorar la circulación y el transporte de nutrientes por el cuerpo mientras elimina lo que no necesita.
– Un masaje?
Si tienes oportunidad, acude con un masajista: un buen masaje ayuda a mejorar la circulación, relajar los músculos y reducir el estrés acumulado.
– Toma un baño
Algunos atletas aconsejan tomar una ducha con agua fría, de máximo 30 segundos, para contraer los músculos. Si quieres aplicar esta técnica, cuídate de corrientes de aire frío pues puedes enfermarte.
– Duerme bien
Es el método por excelencia para recuperarte de cualquier situación: en este proceso tu cuerpo detecta posibles lesiones y las cura y genera hormona del crecimiento, responsable de fomentar la formación de tejidos. Asimismo, escucha a tu cuerpo y reduce la intensidad de tu rutina en caso de que sientas molestias en tu siguiente entrenamiento.
– No sobre entrenes
La mejor manera para dejar descansar a tu cuerpo es diseñar un plan de ejercicios que tenga el balance entre actividades y periodos de relajación. Acude con un entrenador que te ayude a ejercitarte de manera saludable y de acuerdo a tus posibilidades y límites. Con el tiempo, y si lo haces adecuadamente, verás recompensados tus esfuerzos con mayor masa muscular y rendimiento físico.