Mantén tu cerebro en forma
Normalmente estamos acostumbrados a ejercitar nuestros músculos, y aunque el cerebro no sea uno de ellos, este órgano también necesita ejercitarse.
No hablamos de realizar ejercicios para la memoria como crucigramas, sopa de letras o armar un cubo Rubik, -aunque estos también sirven-, sino del ejercicio físico como tal, puesto que beneficia al cerebro más de lo que te imaginas.
De acuerdo con una investigación llevada a cabo por la Universidad de Illions, en los Estados Unidos, existe una relación comprobada entre el ejercicio físico y el desempeño intelectual. Para ello, analizaron a 2 grupos de chicos: el primero practicaba actividad física y el segundo, no.
El resultado: los que hicieron ejercicio tuvieron mejores rendimiento en las pruebas, que aquellos que no lo realizaron.
Además, comprobaron que los ejercicios aeróbicos como correr, andar en bici, caminar o nadar, pueden hacer más inteligentes a las personas, de manera temporal.
Justin Rhodes, médico, neurocientífico y profesor de psicología en el Instituto Beckman para Ciencia Avanzada y Aprendizaje de la universidad que citamos anteriormente, indicó que el ejercicio aeróbicos beneficia nuestro cerebro de dos maneras:
1. A corto plazo. “Tienes adrenalina en la sangre, lo que es una hormona que despierta tu cerebro, lo que hace que tus células nerviosas estén más propensas a encenderse, así que puedes prestar mejor atención y aprender más eficientemente”, dijo Rhodes.
2. A largo plazo. “Esto no significa que el ejercicio aeróbico te haga más inteligente a largo plazo, sino que mantiene intacto a tu cerebro y funcionando en la mejor capacidad posible, señaló el neurocientífico.
Como sabemos que después de toda actividad física necesitas recuperarte, te compartimos un par de recetas que te proporcionarán todas las energías necesarias para el próximo entrenamiento de tu cuerpo y de tu cerebro.