Exprímeles el sabor
Desde hace varios años, encontramos en los refrigeradores de casi todas las casas, una caja de leche vegetal. La más famosa es la de soya, le sigue la de almendras y luego la de coco. ¿La razón?
Puedes obtener leches alternativas para tus postres, a partir de legumbres como la soya, pseudocereales como quinoa y amaranto, y cereales como la avena, el arroz o el kamut, a base de un tipo de trigo duro, llamado khorasan. A esta variedad de alimentos se suman frutos secos y semillas como almendras, avellanas, pepitas de girasol o de ajonjolí; y frutos como el coco.
Estas alternativas a las leches animales te aportan los nutrientes esenciales, se digieren fácilmente, tienen un sabor y textura agradable y son muy versátiles; por eso puedes utilizarlas al preparar tus postres, en casa.
También puedes probar prepararla tu mismo. Para esto debes hervir el ingrediente con el que quieras preparar tu leche, triturarlo con un poco de agua mineral, remojarlo (al menos 12 horas antes), y si deseas, endulzarlo con edulcorantes naturales, miel de agave o de abeja.
De hecho, la leche de soya es una de las ideales para hacer preparaciones al horno. ¿El resultado? Postres consistentes y cremosos; además su sabor no se altera. Si por el contrario buscas una leche vegetal para preparar postres fríos, la de almendras es perfecta para ti.
De acuerdo con El recetario vegano de Igualdad Animal, “para postres y postres preparados como natillas, postres cremosos, creme brulee o crema catalana, por ejemplo, puedes usar leches de soya, arroz y avena”.
Te invitamos a que incluyas las leches vegetales en tu alimentación diaria, y por supuesto, en tus postres. A continuación te compartimos 2 recetas en donde podrás usarlas. Recuerda: el toque secreto siempre será compartir ¡y disfrutar!.