Comer en familia
Sentarse a comer en familia vale la pena; además de mejorar la relación familiar, es una buena forma de educar y enseñar valores a tus hijos. Los beneficios son:
-Desarrollan mucho más vocabulario que leyendo, porque se involucran en las conversaciones.
-Sentirse cómodo en el ambiente; se acostumbre a hacer y responder preguntas y a escuchar y analizar.
-Aumenta su autoestima y los lleva a tratar de buscar esa misma escena en otros ambientes, eso los lleva a generar vínculos con otras personas.
-Mejora las habilidades comunicativas y sociales.
Para mantener este hábito, sigue estos tips:
1.Establezcan un horario para comer todos juntos.
2.No obligar a los hijos a comer; ellos poco a poco sentirán curiosidad por probar alimentos nuevos.
3.Darles las porciones adecuadas es importante para evitar problemas digestivos, mantener su peso y en general su salud. Aunque prepares alimentos sanos, modera la cantidad, pues todo en exceso es malo, hasta el agua.